El diputado Ignacio Mier Velazco, coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, sostuvo que la inseguridad se abate atendiendo las causas que generan la desigualdad y la pobreza.
Explicó que la inseguridad es un problema estructural que yace en la desigualdad, en la pobreza y en el abandono que instauraron administraciones anteriores. Por ello, destacó la importancia de la política de abrazos, no balazos de la Cuarta Transformación, la cual consiste en abatir las desigualdades, que son la causa primaria del daño al tejido social.
“Convirtieron a México en una fábrica de pobres, convirtieron a nuestro país en una fábrica de frustraciones donde la mayoría de la gente no veía una esperanza. Hoy, el horizonte para los mexicanos es mucho más prometedor”, afirmó.
A pesar del reto que implica, el líder morenista confió en que pronto el panorama continúe mejorando para el pueblo de México: “Yo estoy seguro que en el corto plazo y en el mediano, el mejoramiento en los ingresos, en el consumo, en las condiciones de vida, en la reducción de la brecha de desigualdad, van a permitir también que las causas que generan la inseguridad vayan resolviendo este problema”.
Para lograrlo, aseveró, es necesario profundizar en los mecanismos de coordinación entre los tres órdenes de Gobierno y no dejar todo en manos de la Federación: “El discurso de dejar todo al Gobierno federal, todo a Guardia Nacional, ha sido un pretexto por parte de autoridades municipales y de autoridades estatales”, apuntó.
Finalmente, el coordinador de la bancada guinda celebró el crecimiento económico del país. Expuso que los mecanismos de evaluación de los organismos que miden distintos indicadores en varios países del mundo sitúan a México en posiciones positivas.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), por ejemplo, coloca a nuestro país entre las principales economías en el mundo y con crecimiento más estable.
Por otro lado, dijo, las calificadoras ubican al país con un pronóstico por encima de la expectativa de los criterios en política económica; además, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial posicionan a México entre las 12 economías más potentes del mundo.
“Los niveles de consumo se incrementaron en 30 millones, la redistribución del ingreso, a través de los programas sociales, ha permitido que se abatan las desigualdades, que se reduzca el número de pobres. Esa es la política de abrazos”, declaró.