Este domingo se realizó la edición XIV de la Marcha de las Putas, donde exigieron políticas públicas integrales para que cese el estigma, los prejuicios, la discriminación y persecución contra las trabajadoras sexuales.
Durante su trayecto los colectivos enfatizaron que las asesinadas no han muerto, que no serán olvidadas y que seguirán pidiendo justicia por ellas.
Una vez llegando al zócalo aprovecharon para instalar una ofrenda donde fueron recordadas 47 mujeres que sufrieron feminicidios.
Asímismo, citaron a 33 mujeres trans registrados durante los últimos 11 años y recordaron la exigencia de tipificar este tipo de agresiones como transfeminicidios y no solo como crímenes de odio.
Cabe mencionar que, en dicha marcha, participó Rocío Limón, madre de Paulina Camargo, quien permanece como desaparecida desde hace 10 años.
Finalmente, reprocharon los 341 feminicidios registrados en el sexenio en el estado y de los cuales no han recibido la justicia justa.