Para este 2024 se colocarán 28 altares en el municipio de Huaquechula, 5 de ellos dedicados a artesanos de la demarcación y que han dejado una tradición en la elaboración de ceras escamadas, dulce de alfeñique, candeleros, construcción de altares y una experta en el ritual de la colocación de la sombra.
Familiares de los fallecidos destacan que los cinco fueron personajes de la comunidad, cuya historia de vida giró en torno a esta tradición, con su deceso perdimos a algunos de los pocos artesanos que quedan en el municipio.
Maria Luisa Pérez Reyes – Artesana de ceras escamadas
Elena Dolores Vargas – Artesana de alfeñique
Panchita Moreno Fuentes – Especialista en ritual de la sombra
Froylan Martínez Cuenca – Artesano alfarero
Ignacio Peralta Soledad – Artesano de Candeleros de barro policromado
En voz de Raymundo Pérez Mendoza, padre de María Luisa, artesana de ceras escamadas, declaró que los altares que se colocarán están llenos de amor y devoción, que no se levantan con ladrillos, sino con recuerdos, deseos y nostalgia; las flores de cempaxúchitl con su vibrante color naranja adornan estos altares como faros que guían a los espíritus de sus seres queridos de regreso a casa, las velas parpadeantes iluminan el camino como faros en la oscuridad que guiarán su camino hasta llegar a su altar.
Raúl Marín Espinoza, alcalde de Huaquechula, invitó a las nuevas generaciones a no dejar morir esta tradición artesanal que caracteriza a su municipio y aprender la elaboración de sus tradicionales artesanías.
“Compartimos la tristeza de sus familiares, pero como comunidad nos entristece también saber que son menos nuestros artesanos, ellos han sido históricamente los creadores de aquellos elementos que visten nuestros altares, por ello es que se trabaja en la documentación para el rescate de nuestras tradiciones”, acotó.
Asimismo, recordó que en los majestuosos Altares de Huaquechula cada elemento tiene su significado, así como sus niveles: el 1er. nivel representa lo «terrenal», aquí se colocan los gustos que tuvo el ánima en vida: comida típica, bebidas, objetos personales, los llorones (piezas de yeso que representan a los deudos, además se coloca un espejo que refleja la fotografía del ánima, alude a la intangibilidad del alma.
El 2do. nivel, es la conexión entre el cielo y la tierra, aquí se coloca la imagen religiosa a la que era devoto el ánima para ayudarla a llegar al cielo y por último el 3er. nivel, representa el cielo o la gloria, el lugar donde se pretende llegar, aquí se coloca un Cristo o una cruz.
Enfatizó que los Altares Blancos son parte del Patrimonio Cultural de su localidad, desde 1997 decretado por el Congreso del Estado de Puebla, su importancia radica también en ser un genuino ritual milenario cuya edad contemporánea alcanza los 400 años de existencia ya que data desde tiempos prehispánicos y se ha ido adaptando y mezclando con la religión católica sobreviviendo hasta la actualidad.
Mencionó que una de las partes más importantes del ritual es la bienvenida, pues tiene una estrecha relación con la parroquia y el ex convento, ya que con el repique de sus campanas indica el momento exacto en el que las familias salen a la calle acompañados de pétalos de cempasúchil, sahumerios con copal, agua bendita y ceras para hacer un camino en dirección del camposanto a la casa de los deudos para recibir al ánima.
* Ritual de bienvenida: inicia a las 14:00 horas.
* 28 de octubre: se reciben a las personas que murieron de forma trágica.
* 31 de octubre: día de los angelitos o infantes.
* 1 de noviembre: personas que fallecieron por causas naturales.
* 2 de noviembre: despedida a las ánimas benditas.