Desde tiempos inmemoriales, la propaganda ha jugado un papel fundamental en las guerras.
Sin embargo, la segunda guerra mundial catapultó como nunca a la propaganda, ambos lados, el eje y los aliados, utilizaron esta poderosa herramienta con la finalidad de desmoralizar al enemigo y por supuesto, inyectar moral a sus tropas.
La posguerra y la “guerra fría”, también fue un juego de propaganda política y de percepción, el duelo entre los buenos y los malos y esto ha perdurado hasta nuestros tiempos.
Todo esto viene a colación, porque la actual campaña se ha transformado en una guerra de narrativas y de percepción.
Cabe señalar que, el presidente López es un genio en el arte de la comunicación y la propaganda, al igual que su director de Comunicación Social, Jesús Ramírez Cuevas, no en balde la mañanera es el mejor instrumento de propaganda política que ha existido en este país, mediante el cual, el mandatario ha impuesto durante más de 5 años, la narrativa de un país exitoso, en paz y feliz, que dista mucho de realmente serlo.
Quien gana la narrativa, gana la guerra de la percepción y eso es lo que ahora tratan de hacer los contendientes por la gubernatura y la alcaldía de Puebla, pero con diferentes resultados.
Mientras tanto, Armenta y su equipo comandado por Javier Sánchez Galicia y Pepe Tomé han ganado el tema de la narrativa en la lucha por la gubernatura de Puebla, de tal forma que en la percepción domina el hecho de que Alejandro ganará la gubernatura, en la lucha por la alcaldía, a pesar de todos los esfuerzos realizados, no pasa lo mismo.
En la pelea por la presidencia municipal y aunque a muchos nos les guste, la narrativa la ha ganado Mario Riestra, de tal forma que muchos asumen que ganará la alcaldía, pese a que el candidato gubernamental, Armenta ya se ha dedicado a salir todos los días a municipios y regresar a la capital para apoyar el esfuerzo de José Chedraui y el resto de los candidatos de Morena.
La narrativa de que Riestra puede ganar la presidencia municipal de Puebla ha hecho que prevalezca la percepción de que, en la entidad, habrá voto diferenciado, mismo que parece comprobarse, si se toma en cuenta la enorme división que generó el proceso interno de Morena por las candidaturas a las presidencias municipales.
Consciente de este hecho, Eduardo Rivera y su equipo han comenzado a darse a la tarea de revertir esta posición, mediante eventos con buena participación, como el llevado a cabo el pasado viernes en Izúcar de Matamoros, pero también con la adhesión de algunos cuadros que militaron en Morena, como Adán Blanca, Gemma Gracián y Tamara López.
En total se dice que cuadros de Morena en 56 municipios de la entidad, han cambiado ya de bando y se han pasado a las filas de la alianza opositora y de su candidato, Eduardo Rivera.
Sin embargo, la narrativa dominante es que Armenta tiene la suficiente ventaja para imponerse en la elección del 2 de junio, la guerra de la percepción la tiene aún de su lado el candidato morenista, quien tiene como uno de sus principales argumentos, su conocimiento de la entidad, producto de sus 35 años de actividad política.
Pero, la capital sigue siendo el principal “foco rojo” en la contienda, al igual que toda la zona conurbada, salvo Cuautlancingo en donde se prevé que Morena se alce con el triunfo de la mano de su candidato Omar Muñoz.
La narrativa y la percepción es que Acción Nacional ganará en toda esta franja, en donde habitan el 42 por ciento de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral que va a estar en juego el 2 de junio, aunque también es cierto que la contienda se encuentra bastante cerrada.
Las próximas semanas serán clave en la lucha que se vive tanto por la gubernatura de Puebla, como por la presidencia municipal.
Lalo y Mario con los empresarios. Este lunes, los candidatos del PAN a la gubernatura de Puebla, Eduardo Rivera y a la alcaldía, Mario Riestra, se reunirán con un grupo selecto de empresarios a invitación de un gran personaje, Alfredo Rivera Espinosa.
Alfredo es de los pocos en Puebla que se puede dar el lujo de lo mismo dialogar con el presidente López o su esposa, Beatriz Gutiérrez, como con la candidata presidencial del albiazul, Xóchitl Gálvez o con el abanderado de Morena a la gubernatura, Alejandro Armenta.
De hecho, en este mismo espacio, dimos cuenta la semana pasada de una reunión que tuvo Armenta con este mismo grupo de empresarios, a instancias del influyente Alfredo.
Ya platicaremos que tal les fue ahora a los candidatos de alianza opositora, luego de este encuentro con una parte de los capitales más importantes de la entidad.
Armenta en la BUAP. También tal y como lo adelanté, este lunes el candidato de Morena a la gubernatura de Puebla, Alejandro Armenta Mier, se reunirá con el Consejo Universitario de la BUAP, que encabeza la rectora, Lilia Cedillo Ramírez.
La académica, quien buscará la reelección en el 2025, vivirá uno de los momentos más importantes durante su rectorado, ya que también recibirá el 23 al candidato opositor, Eduardo Rivera Pérez y el 24 al representante de Movimiento Ciudadano, Fernando Morales Martínez.
Vamos a ver cómo le va a Alejandro, quien precisamente, es egresado de la escuela de Administración Pública de la máxima casa de estudios.
El soldado Tomé. Si hay un personaje que es leal en toda la extensión de la palabra, es el coordinador de comunicación de Morena, José Tome Cabrera.
Pepe, como le conocemos sus amigos, es un hombre incondicional a su amigo, el candidato a la gubernatura, Alejandro Armenta Mier.
La lealtad de Pepe ni siquiera es tema de discusión, de ahí que se equivocan quienes creen que nuestro personaje, actúa o se mueve por cuenta propia. Su lealtad es tal, que no hace absolutamente nada, sin antes consultarlo con quien tiene que consultar.
Su institucionalidad es semejante a la de un soldado, ni más, ni menos.