El candidato de la alianza que encabeza el PAN en Puebla, Eduardo Rivera Pérez, viene tejiendo fino, tal y como lo señaló ante un grupo de comunicadores hace una semana, previó al arranque de la campaña electoral.
El aspirante del albiazul, si bien, no tiene el conocimiento territorial que tiene su adversario, Alejandro Armenta, está aprovechando la cantidad de descontentos que generó el proceso de selección de candidatos de Morena a los diferentes puestos de elección popular, pero principalmente, a las presidencias municipales.
El mejor ejemplo, es lo que ocurrió ayer que el panista, estuvo en el municipio de Z. Mena y luego de ahí se fue a Xicotepec de Juárez, en donde sostuvo una reunión con líderes de la zona en el hotel “Mi Ranchito”.
¿Quiénes son esos líderes? Fueron el ex presidente municipal de Xicotepec, Benito Animas Arellano, quien fue presidente municipal en el trienio 1999-2002 por el PRI, con una votación superior a la del entonces candidato a la gubernatura Melquiades Morales Flores y el también ex presidente municipal, Juan Carlos Valderrábano Vázquez, quien era cercano al ex gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas.
Ánimas y Valderrábano tienen en común el ser enemigos del candidato de Morena a la alcaldía, Carlos Barragán Amador, quien se dice compró la candidatura del oficialismo, por un precio estratosférico de pesos.
Carlos Barragán también fue presidente municipal de Xicotepec y comenzó su carrera política al lado del entonces secretario de Gobernación, en la era de Mario Marín Torres, Javier López Zavala, de quien es compadre.
El ex edil capitalino se ha dado a la tarea de tratar de captar a todos los inconformes dentro del proceso de selección de candidatos de Morena, durante esta gira de trabajo realizada en la sierra Norte de la entidad, por municipios como Z. Mena, Xicotepec de Juárez, Huauchinango y Pahuatlán, coordinada por el presidente del Comité Estatal del PRD, Carlos Martínez Amador, quien es originario de esta región y cuyo hermano, Eloy, es candidato a la presidencia municipal de Huauchinango, algo le habrán aprendido los hermanos a su fallecido tío, Alberto Amador Leal.
Esto que ocurre en la sierra Norte de Puebla, se ha comenzado a replicar por parte de Rivera en todo el estado, incluso en la mixteca poblana, en donde diversos productores, sobre todo de mezcal, están dispuestos a jugársela con el candidato de la alianza “Mejor Rumbo para Puebla”, quien también juega su juego, sabedor de que, si en algo es superado por el candidato de Morena, Alejandro Armenta, es en estructura.
La gran traición. Alguien le debe de decir al candidato de Morena, Víctor Correau, que es objeto de una gran traición por parte de quienes impulsaron su candidatura a la presidencia municipal de San Andrés Cholula.
Correau Galeazzi es un buen hombre, un buen empresario; pero, al parecer no se ha dado cuenta de que lo enviaron a perder o como dijera el clásico, “así me lo parece”.
Víctor no solo va en contra de la esposa del actual presidente municipal en funciones, sino que también tiene que hacer frente a otra candidata, que trae todo el apoyo financiero y económico, la candidata del Verde, Bere Porquillo.
Bere tiene todo el apoyo del nuevo duelo de este partido en Puebla, el todopoderoso titular de la SEP, Jorge Estefan Chidiac, quien está interesado en que gane Porquillo o si no, que quede en segundo lugar para poder meter a su hijo como regidor y cuidar sus poderosos intereses inmobiliarios en esta zona y la de Santa Clara Ocoyucan.
Basta con revisar la lista de candidatos a regidores dentro de la planilla de Porquillo, para darse cuenta de en donde está el interés de quienes están detrás de la campaña de la candidata del Verde.
“Charbelito” en el lugar número uno, en el dos Liliana Castillo, esposa de Migue Huepa y en el tercer lugar, Juan Bautista García Casas.
Pero, además, alineados a Porquillo hay personajes como Roberto Maxil, Sergio Mirón y Salvador Castañeda. Uff…
Si de todo esto no se ha dado cuenta Víctor, pues entonces ya no hay nada que hacer.
En Tehuacán, las cosas también pintan mal. Otro lugar en donde en vez de apoyar a Morena, el poder va con el Verde es el Tehuacán, en donde van a dejar solo a Alejandro Barroso Chávez, por el simple hecho de que el doctor se la jugó en la interna con Nacho Mier en vez de Alejandro Armenta.
El Verde sigló al actual edil, Pedro Tepole, quien, a pesar de sus malos resultados, increíblemente tiene la más alta intención de voto, aunque habrá que ver si en esta guerra fratricida, a ver si no salen perdiendo los dos, en una plaza electoralmente clave para definir la elección.
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