La diputada federal de Morena, Julieta Vences Valencia presentó iniciativa para que el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), pueda emitir opiniones sobre los planes y programas de estudio que diseña la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género de la Cámara de Diputados destacó que la enmienda es de suma importancia, ya que el INMUJERES podría coadyuvar al cumplimiento del mandato constitucional establecido en el artículo 3º, en tanto que la educación cuente con perspectiva de género, misma que debe adaptarse a las nuevas circunstancias y barreras a las que se enfrentan las mujeres mexicanas en el día a día.
La legisladora poblana demandó que resulta crucial incluir programas educativos con perspectiva de género para combatir la violencia dirigida en contra de las mujeres, sobre todo en un entorno donde las políticas sociales principales suelen abordar las acciones para proteger derechos sociales en general en lugar de promover el empoderamiento femenino.
“Una educación con perspectiva de género abarca diversas características esenciales, entre las que se destacan la educación sexual y la eliminación de enseñanzas basadas en estereotipos de género, especialmente en lo que concierne a los distintos tipos de violencia”, puntualizó.
También, aseguró, la educación, concebida como motor de cambio y transformación, es una trinchera fundamental para impulsar la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
Vences Valencia sostuvo que el cambio en los contenidos de los programas y planes educativos debe ser parte de una política de igualdad sustantiva fomentada desde el Estado para eliminar todo tipo de roles, estereotipos y prejuicios basados en el género.
“Tanto la discriminación, como la violencia de género son manifestaciones que vulneran a los derechos humanos y que son una consecuencia de procesos educativos y formativos que encuentran su base en relaciones de poder asimétricas”, expuso.
Asimismo, abundó, es importante mencionar que los problemas relacionados con la escolarización de las niñas no se encuentran desligado del contenido educativo, ya que los estereotipos de género, las amenazas a la seguridad emocional de las niñas y el currículo insensible a las cuestiones de género conspiran directamente contra el ejercicio del derecho a la educación.
Julieta Vences refirió que de acuerdo a datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en 2022, a partir de la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) de 2017, se indica que un 25.7 % de las niñas de 9 a 11 años y un 35.2 % de las adolescentes de 12 a 17 años sienten que en México se les respeta poco o nada en términos de sus derechos.
Respecto a las causas principales de discriminación, el 41.7 % de las niñas de 9 a 11 años mencionaron haber experimentado discriminación en la escuela debido a su peso o estatura, mientras que entre las adolescentes este porcentaje fue del 30.7 %.
En cuanto al entorno donde más ocurre la discriminación, un poco más de la mitad de las adolescentes de 12 a 17 años (53.3 %) señalaron haber sido discriminadas en los últimos 12 meses en su trabajo o escuela, y un 19.6 % dentro del ámbito familiar
La iniciativa reforma la fracción XVI del artículo 7 de la Ley del Instituto Nacional de las Mujeres y el párrafo segundo del artículo 23 de la Ley General de Educación.