Andrea Hernández, de 41 años, una de las valientes alpinistas rescatadas tras perderse en el Citlaltépetl, podría enfrentar la pérdida de dedos de la mano. La alpinista, miembro del grupo “Los Barrancracks”, sufrió necrosis en las manos y quemaduras de tercer grado en rostro y pies debido a las extremas bajas temperaturas en la cima.
Rescatada por equipos de la Cruz Roja Mexicana, Protección Civil Estatal y Socorro Alpino México, Andrea fue expuesta a condiciones climáticas severas, alcanzando temperaturas de hasta 10 grados bajo cero. También presentó daños en los ojos y otros efectos de la hipotermia.
A pesar de llegar a Jalisco bajo atención médica desde Puebla, la alpinista se encuentra en riesgo. Otros sobrevivientes, como David y Rodrigo, también ingresaron al Hospital de Chalchicomula de Sesma en Puebla por afectaciones derivadas de hipotermia, fotoqueratitis y quemaduras por congelamiento.
El resto de los montañistas, de regreso en Guadalajara, se encuentran en buenas condiciones generales de salud.