Alma Méndez
Si bien la cuesta de enero y el incremento de la canasta básica tiene a los poblanos preocupados por sus gastos diarios, esto no fue impedimento para que este 2 de febrero Día de la Candelaria no se paguen los tamales, donde se pueden vender más de 800 tamales y más 150 litros de atole, arroz o champurrado.
En entrevista, doña Guadalupe López contó que para este año con el incremento de los insumos para preparar los tamales, tuvo que subirle un peso a su costo, por lo que el tamal tradicional vale 14 pesos y el jarocho 17 pesos, sin embargo, este ajuste no impidió que su venta se incrementara al 20 por ciento.
Desde las 6 de la mañana tamaleros ubicados en varios puestos ubicados en las esquinas de diversas calles de la ciudad, en triciclos o en camionetas, se apostaron a invertirle a su producto, pues este día es cuando más se vende.
Asimismo, contó que, para hacer las ventas de este día, se preparó desde una semana antes, comprando todos los productos para poder realizar los guisos, donde participó toda la familia en la preparación de los mismos, así como para vendimia.
“Es nuestro mejor día para la venta de nuestro producto, la familia ayuda en las compras y en la preparación, así como para la venta, une a la familia y se gana dinero”, finalizó.