Cholula, Puebla, a 15 de enero de 2023.- Pese a existir ayuda preventiva, medicamentos y profesionales de la salud mental, será prácticamente imposible el erradicar la depresión de la humanidad, el por qué lo explica el Dr. Juan Antonio González Puente, catedrático de Psicología de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
“La depresión es un trastorno con un registro muy antiguo, ha acompañado el recorrido histórico de la humanidad” y estará presente por más tiempo, así lo declaró el Dr. González Puente a propósito del Día Mundial de Lucha contra la Depresión. Esto por los múltiples factores que la detonan de forma global (depresiones económicas, guerras, desastres naturales, situaciones de emergencias sanitarias) y personal (exposición a situaciones estresantes, enfermedades preexistentes, desempleo, rupturas sentimentales, problemas económicos, presiones sociales, antecedentes personales o familiares, pérdida o enfermedad de un ser querido, alumbramiento entre otras).
Esta enfermedad aqueja a cualquier ser humano, sin importar edad, raza, nivel socioeconómico, educativo o cultural; de esta forma ha afectado a más de 350 millones de personas, acorde a la Organización Mundial de la Salud (OMS). Sin embargo, los síntomas se reflejan de diversa forma en niños, adolescentes, jóvenes, adultos de mediana edad y mayores, desde la ansiedad, malhumor, enfermedades falsas, negación a salir de casa, preocupación a ciertas situaciones negativas, frustración, intranquilidad, problemas de escuela, baja autoestima, trastornos de la alimentación, déficit de atención, somnolencia excesiva, mayor apetito, diarrea o estreñimiento. En casos más severos se llega al consumo de drogas, fobia social, pánico, pensamientos de autolesión o atentar contra su propia vida, estimándose que el 80% de los suicidios perpetuados presentaron previo un cuadro depresivo, según la información del catedrático de la UDLAP.
Un apunte del Dr. Juan Antonio González es que las mujeres tienden a presentar más cuadros de depresión a comparación de los varones, tal vez por factores hormonales, biológicos y/o su ciclo de vida. Incluso la OMS compara los casos entre ambos géneros: 5,1% de féminas y 3,6% de hombres.
Ante el cuestionamiento de cuánto pudiera durar una persona deprimida, el catedrático del Departamento de Psicología de la UDLAP presentó información de casos de dos semanas; en distimia (trastorno depresivo persistente) al menos durante 2 años, hay a quienes les aparece y desaparece con las estaciones del año; o en fases graves, una persona puede tener síntomas de psicosis por años. Referente a su detección, el experto exteriorizó una variedad de pruebas psicológicas a emplearse (escala de depresión de Hamilton, inventario de depresión de Beck, escala de depresión geriátrica), sin embargo, el diagnóstico debe estar ratificado por un profesional en salud mental. “El desarrollo de la depresión se presenta de manera paulatina y gradual, en un principio puede como confundirse con cambios habituales del estado de ánimo, sin embargo, su persistencia y gravedad de síntomas darán evidencia de un problema de salud importante”, añadió el Dr. González Puente.
Para concluir su intervención, el profesor de tiempo completo de la UDLAP informó la existencia de distintos tratamientos para la depresión, desde medicamentos como antidepresivos (a los cuales pidió paciencia para surtir efecto, pues puede variar entre 4 a 8 semanas con resultados paulatinos); terapias de estimulación cerebral; o psicoterapias de la mano de profesionales de la salud mental, quienes están altamente preparados para llevar casos y dar soluciones gracias a su aprendizaje a través de planes de estudio como el de Psicología Clínica que se imparte en la Universidad de las Américas Puebla.
Aunado a ello acotó las actividades que pueden ayudar a las personas con depresión: alentarlos a realizar alguna actividad física, mantener rutinas de sueño, de tomar sus medicamentos, de alimentarse saludablemente, acompañarlos a sus citas médicas, ayudarlos a interactuar con otras personas, reconocer sus alcances y limitaciones, evitar el consumo de sustancias nocivas, pero sobre todo dar apoyo, comprensión, ánimo y tener mucha paciencia.