Jorge Barrientos
El rector de la IBERO Puebla, Mario Ernesto Patrón Sánchez, presentó su Informe Anual de Actividades, donde resaltó los logros que ha tenido esta casa de estudios, en sus ya 40 años, donde se han tocado más de 23 mil almas, asegurando que el de este rectorado coincidió con la promulgación de las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús, que cumplen ya los primeros años de vigencia.
Asimismo, dijo que cinco años de cuatro décadas de vida. Una pandemia; múltiples crisis económicas, políticas, sociales y humanitarias; más de 20 mil profesionistas y más de 5 mil educandos.
A cinco años al frente de la IBERO, se ha se ha hecho escuchar de la voz de la Comunidad, los logros alcanzados, los retos superados y las vivencias recogidas en el periodo 2023-2024 que «ha sido no simplemente una época de cambios, sino un cambio de época todavía en pleno curso», dijo el titular de Rectoría.
“Así, la obra encomendada a la Compañía de Jesús se transformó y creció para seguir cumpliendo los ejes de acción prioritarios promulgados por las Preferencias Apostólicas Universales de la Compañía de Jesús al inicio del rectorado Patrón Sánchez: Compartir la riqueza de la espiritualidad ignaciana como vía de encuentro con Dios; caminar junto a los descartados del mundo en una misión de reconciliación y justicia; colaborar para el cuidado”.
Resaltó que, aunque todas estas prioridades son igualmente importantes e interconectadas, el acompañamiento de los jóvenes es especialmente relevante para las universidades jesuitas. Se destaca la importancia de que estas instituciones profundicen su comprensión de la realidad desde la perspectiva de los jóvenes, abarcando tanto sus desafíos como sus capacidades para imaginar y construir un futuro mejor.
Además, mencionó la necesidad de las universidades de asumir un papel activo en este proceso, comprometiéndose a entender y apoyar a los jóvenes en sus contextos específicos, reconociendo sus conflictos, miedos y contradicciones, pero también dejando que la audacia y la generosidad de los jóvenes los inspire y movilice hacia la construcción de un futuro lleno de esperanza.
Asimismo, aseguró que las Preferencias Apostólicas Universales subraya un llamado a las universidades jesuitas a involucrarse profundamente con las juventudes, no solo para acompañarlas, sino también para aprender de ellas y contribuir conjuntamente a la configuración de un mundo más justo y esperanzador.
