Jorge Barrientos
El arzobispo de Puebla, monseñor Víctor Sánchez Espinosa, pidió por el descanso eterno de Ricardo Antonio Meneses, quien murió víctima de la violencia y también por Brayan Isidro Zarco que murió a causa de una novatada escolar.
En este tenor, dijo que el trágico asesinato de Ricardo Antonio Meneses en Puebla y de Brayan Isidro Zarco en la Escuela Normal Rural Lázaro Cárdenas del Río en Tenería, Estado de México, subraya la grave situación de violencia que enfrenta el país.
En respuesta a estos hechos, monseñor, desde la Basílica Catedral angelopolitana, destacó la urgencia de recomponer el tejido social comenzando por la familia. En un contexto de crisis, instó a actuar conforme a nuestras creencias para evitar la disonancia entre pensamiento y acción.
Además, pidió recordar y orar por las víctimas, especialmente por Ricardo Antonio Meneses y Brayan Isidro Zarco, quienes fueron asesinados recientemente. Estos hechos violentos subrayan la necesidad de una transformación profunda en la sociedad mexicana, empezando desde el núcleo familiar y extendiéndose a toda la comunidad.
En su mensaje, durante la celebración religiosa, que atrajo a cientos de turistas y locales, Monseñor hizo un llamado a vivir coherentemente y denunciar la injusticia para no permitir que se normalice.